Conocido en inglés como Green Belt Movement (GBM) el movimiento cinturón verde, fue fundado en 1977 por Wangari Maathai en colaboración con el Consejo Nacional de Mujeres de Kenia (NCWK) en un contexto especialmente complejo. Desde aquel inicio hasta la actualidad, se ha ido tejiendo una red de más de 4.000 grupos comunitarios que plantan árboles y protegen el medio ambiente en Kenia. En 2020 GBM ya había superado los 51 millones de árboles plantados. Conocida como “Mama Titi” (Madre de los Árboles), Maathai nació en Ihithe (1940), un pueblo en el centro de Kenia que, por aquel entonces, era colonia británica. Se licenció en Biología en Estados Unidos para, posteriormente, ampliar sus estudios en Pittsburg (EEUU), Alemania y en la Universidad de Nairobi, convirtiéndose en la primera mujer africana en lograr un doctorado y obtener el Premio Nobel de la Paz (2004). Afirmaba que “Los únicos que podían inspirar al ser humano eran los que habían abandonado esta vida sin dejar de trabajar por la de otros”. Maathai dedicó hasta el último día de la suya para dejar en herencia un mundo mejor, consciente de que la protección del medioambiente es fundamental para la paz y el desarrollo sostenible.
Paralelamente, este proyecto se encuentra vinculado a la raíz familiar Kikuyu de Wangari Mathaai, y a una publicación en formato libro de artista (Fábulas y cuentos de la étnia Kikuyu. El Caballero de la Blanca Luna, Ed.) comenzada en 2010 y aún en desarrollo que traslada a papel cuentos tradicionales de transmisión oral en riesgo de perderse.
Tania Blanco (Valencia, 1978), artista visual y activista, articula su obra a través diversos vectores de pensamiento, entre los que cabe destacar las relaciones entre individuo, tecnología y naturaleza, y el papel del complejo industrial, militar, alimentario, médico y farmacéutico; o la preocupación por el clima sociopolítico más reciente; proponiendo una lectura crítica y satírica, que, a partir del concepto de biopolítica-biopoder, trata de poner en evidencia las disfuncionalidades de las sociedades capitalistas neoliberales. Empujada por un singular inconformismo, su obra persigue evidenciar la profunda contradicción entre los sistemas que amenazan la vida y el concepto de democracia; tanto en la explotación desmedida de recursos naturales finitos como en la construcción de las desigualdades sociales. Para materializar estas reflexiones hace uso de distintos medios y soportes (instalaciones, site-specific, pintura, escultura, fotografía y video) que se hibridan, aunque se encuentran fuertemente marcados por la presencia de la pintura.
